Blog sobre reflexiones personales, fotografía y música independiente.

martes, 11 de enero de 2011

Querido Amor:


Cumplimos cuatro años. ¡Qué pronto ha pasado todo este tiempo! No sé si te habrá ocurrido como a mí, pero yo ni me he enterado… ¿Te acuerdas de la primera vez que quedamos? Fue un día de trabajo. Te acercaste a mí y me preguntaste si me apetecía tomar unas cañas. Ni me lo pensé. Hacía tiempo que me había fijado en ti. Estaba deseándolo. En aquel bar nos tomamos nuestras primeras cañas, pero también nos dimos nuestro “casi” primer beso, por lo menos muy cerquita de allí. Resguardados bajo la puerta de salida de algún local de Huertas, tipo “La Salsa”. Chiringuitos “chumineros” maquillados con carmín y traje chaqueta los viernes y sábados. Sí, pues allí te acercaste. Me besaste… y lo demás se queda en nuestra memoria… También recuerdo cuando un día más tarde... me enviaste un mensajito que yo no supe interpretar, y al principio te envié otro sin quedar contigo en... ¡Nada! Me di cuenta cuando ya había pulsado el botón: enviar mensaje. Aquel fue nuestro primer domingo. Nos fuimos a una exposición en el Museo de Caja Madrid. Luego a Lavapiés a tomarnos un té. Después paseamos por la Latina. Y a mí... ya me costó despedirme de ti. Fueron pasando los días hasta que llegamos al puente de la Almudena, que te fuiste de viaje con tus colegas... y luego nos encontramos en otro lugar, en otra casa, en otro sofá. ¡jajaaja! ¡Recuerdas cuándo Eva se enfadó porque no iba a su cumpleaños! El hecho es que hacía unos días, unas semanas, que la cuenta atrás del pasar del tiempo, había iniciado su ligera descarga de arena...

No hay comentarios: